Después del temporal, alerta por frío extremo
- Arte Parte
- 25 may
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 3 jun
Fortalezcamos las acciones solidarias: después del temporal se acerca una ola de frío extremo.
por Iván Mantero
Después de una semana de tormentas en la zona de Provincia de Buenos Aires y sur del Litoral que activó las alertas naranja del SMN y que en algunas zonas llegó a cambiar a roja, el SMN anuncia una nueva alerta por frío extremo para la última semana de mayo. Muchas familias de zonas inundadas aún no han podido volver a sus casas, y todo lo que tenían está arruinado por el agua: ropa, colchones, frazadas, alimentos, etc.

El miércoles 14 de mayo empezó una lluvia que con el correr de los días fue creciendo en intensidad hasta llegar a convertirse en tormentas devastadoras. Hacia la tarde del viernes 16 se reportaron “acumulados superiores a los 200 mm y a la persistencia de tormentas activas, se actualizó fuera de rutina el nivel de alerta a rojo”[1] para partidos de la zona norte de la provincia de Buenos Aires, informó el SMN. El alerta naranja por tormenta se extendió a toda la zona del AMBA, incluido el Partido de Florencio Varela. “El evento del 15 al 18 de mayo de 2025 representa uno de los episodios de precipitación más significativos de los últimos años en esta parte del país” continua el informe.
En muchos barrios del Partido de Florencio Varela, las inundaciones generaron un desastre habitacional. Muchísimas familias tuvieron que ser evacuadas y perdieron todo lo que tenían. Las notas online de los medios locales daban cuenta de este drama humanitario tanto en el contenido de sus noticias, como en el tenor de los comentarios de sus lectores. Por ejemplo, una vecina del barrio de Villa Hudson expresó lo siguiente:
Watson fíjate, por favor, el barrio Villa Hudson. Desastre! Tenemos gente enferma, no entra ambulancia ni remis. Mi marido está en diálisis y no entra el coche que lo lleva y trae. El otro día se cayó, ¿y si se quiebra que pasa? Tengo los impuestos al día[2].
Mientras todo esto sucedía, desde múltiples espacios se ponían en pie campañas de solidaridad, o los comedores cocinaban mayores cantidades para atender a las familias que habían perdido todo, o estaban mojados y necesitaban un plato caliente. El 17 de mayo, por medio del grupo de whatsapp de la Red Villa Hudson (la red de organizaciones e instituciones del mismo barrio del comentario de la vecina), las organizaciones empezaron a intercambiar iniciativas y a colaborar entre sí para dar mejor respuesta a las necesidades. Pero lo que me llamó la atención fue que no solo compartían información sobre las necesidades y acciones que se estaban realizando en el propio barrio, sino que se organizaban para asistir a otros barrios que estaban inundados: colectas de víveres, elementos de limpieza, alimentos, ropa, etc.
“Estamos juntando para las familias de San Jorge/Ardigo que perdieron todo” dijo una compañera, “¿Dónde se colabora? ¿En qué lugar están juntando?” le preguntó otra. “Nosotros estamos haciendo una comida calentita para toda la gente del barrio, para los chicos, y para los vecinos, que la pasaron re mal”, contó otra compañera, que luego comentó que “mañana vamos allá a La Carolina que también están al lado de un arroyo que se desbordó todo y la gente está tan mal… hoy se les brindó mate cocido con tortafritas y un lugar seco para estar los nenes con las mamás. Y mañana se hará comida”.
Al día siguiente, llevaron a Ardigó /San Jorge las donaciones que juntaron en el Comedor Los Chavitos y con lo que colectaron compraron 30 litros de lavandina, 40 de desinfectante, trapos de piso y varias cosas más. Mientras que lo que juntaron en Casa Abierta “Silvia Schand”, lo llevaron a La Carolina: Alimentos frescos, alimentos no perecederos, leche, agua, pañales, ropa, etc.
A casi una semana de las tormentas, muchas familias aún no han podido regresar a sus casas, y las que lo han hecho, han perdido la mayoría de sus bienes. La solidaridad ayuda, pero no es suficiente, sobre todo cuando el Estado cada vez está más ausente de su obligación de atender las emergencias y desastres. Y más cuando un nuevo peligro se asoma en el horizonte.
El servicio meteorológico acaba de lanzar una nueva alerta: a partir del 27 de mayo avanzará desde el sur una ola de frío polar. “El descenso térmico se sentirá con fuerza entre el miércoles 28 y el sábado 31 de mayo. En el centro y norte del país, las temperaturas mínimas se moverán entre los -4 y los 8 °C”[3] dice el nuevo informe del SMN, a la vez que informa que las temperaturas máximas no superarán los 10 a 16 °C.
Pero el frío no llega solo. El mismo informe señala que
“Durante el martes 27 se espera un episodio de lluvias importantes que afectará especialmente a la provincia de Buenos Aires y a la región del Litoral. Se prevén lluvias acumuladas de entre 30 y 80 milímetros, con los mayores valores hacia el norte del Litoral. Estas lluvias marcarán el inicio del cambio de masa de aire y podrían estar acompañadas por vientos intensos del sector sur, con velocidades entre 30 y 50 km/h y ráfagas de hasta 80 km/h.”
Por eso es muy importante estar atentos a las necesidades de los vecinos que ya la están pasando mal con las consecuencias de las tormentas de la semana pasada y que sufrirán doblemente el flagelo del frío polar y las nuevas lluvias. Seamos solidarios y sumémonos a las campañas de ayuda, acerquémonos para que nuestro aporte llegue también con nuestra mano amiga.
⬅️ Memoria, Verdad y Justicia: diálogos en la escuela (nota anterior)
➡️ Días de tormenta: estudiar y trabajar bajo el agua (nota siguiente)
[1] Recuperado el 24/5/025 de https://www.smn.gob.ar/noticias/inundaciones-y-luvias-record-en-buenos-aires-y-el-litoral
Comentarios